Un picor en la espalda justo en ese punto en el que no llegas a rascarte... La de poses y bailes extraños que adquirimos y nunca se consigue acabar con el maldito picor.
Lo mejor, tener a alquien al lado al que pedir auxilio, y entonces a ver cómo os aclaráis para acertar en el lugar exacto: no no, un poquito más arriba, no taaaanto, más abajo, ahora un poquito más a la derecha, un poquito más, ahí, ahííííííí...
Lo mejor, tener a alquien al lado al que pedir auxilio, y entonces a ver cómo os aclaráis para acertar en el lugar exacto: no no, un poquito más arriba, no taaaanto, más abajo, ahora un poquito más a la derecha, un poquito más, ahí, ahííííííí...
¿a quién no le ha sucedido eso alguna vez?jejeje... MUA
ResponderEliminarO mejor... "espera, espera, que ya te digo yo dónde"... te estiras y sueltas: "aquí, aquí mismo, lo ves?". Y que el otro te diga: "ah, pues si ya llegas, yo paso..."
ResponderEliminarjajajaja qué momentazo!!!
Un abrazo!
Estrógena, a mi me ocurre demasiado a menudo. Lo único bueno es que en mi casa tengo una especie de rastrillito que anteriormente fue un boli y me viene perfecto!! El problema es si me pilla fuera de casa...
ResponderEliminarEstherxu, todo un momentazo el que dices, es mejor hacerse el longuis e indicar el camino porque si llegas tú te mandan a paseo!! jaja.
un besazo a las 2! gracias por seguir pasando por aquí :)