ENERO: Viaje a Madrid, Musical El Rey León.
FEBRERO: Nos vamos de Tupper Sex.
MARZO: Ya hace un año que nos dejaste y te echo de menos.
ABRIL: Empezando en el gimnasio. Musical La Bella y la Bestia.
MAYO: Miss Caffeina. La enfermedad de moda se cuela en casa.
JUNIO: Final de curso. Hasta siempre mis niños.
JULIO: Oposición aprobada. Marc llega al mundo. Reencuentro con mis niñas de la uni.
AGOSTO: Playa y desvirtualización de Inma.
SEPTIEMBRE: Fiestas de Monzón en buena compañía. Escapada a Alcañiz a ver MotoGP.
OCTUBRE: Mes de hospital. Empezamos a respirar.
NOVIEMBRE: Cambio de look.
DICIEMBRE: Niebla.
Califiqué el 2012 como mal año, así que uno de los propósitos que me hice para el 2013 era sacar algo bueno de cada mes. No ha salido exactamente como pretendía, pero este es el año que me ha tocado vivir y yo he intentado vivirlo lo mejor que he podido. He tenido meses muy buenos y divertidos. Otros muy emotivos. Algunos malos que se han alargado en el tiempo y se han estirado más de lo que me gustaría. Y también algún mes más tranquilo.
En resumen, no ha sido un mal año, porque hasta la peor parte parece que se ha resuelto del mejor modo posible. Y en cuanto a mí, me he dado cuenta de que soy fuerte y feliz. He aprendido a ser yo misma y no me arrepiento de nada.
Me despido del blog hasta el año que viene, deseando que el 2014 venga cargado de momentos maravillosos y felicidad. Que se cumplan todos vuestros deseos.