Que te digan guapa. Así, sin venir a cuento. Está bien, aunque una no sea muy presumida, no se puede negar que gusta. Y más cuando no se tiene un día especialmente bueno y el autoestima no es tampoco nada del otro mundo...
En mi trabajo, en una clase de pequeñajos de 3 añitos es una maravilla porque raro es el día en que no oyes un piropo. Cuando me cambié de gafas fue como un festival. El año pasado, la primera vez que me ricé el pelo, la frase que me soltaron fue genial: "Qué enredones tan bonitos llevas, seño" (no supe si tomármelo como un piropo o qué).
Y cuando llegas a clase y 15 nenes se abrazan a tus piernas y todos a la vez dicen que te quieren mucho... es que se me cae la baba. Adoro mi trabajo :)
¡Lo extraño es que no te lo digan a cada momento! ¡Guapa! :D
ResponderEliminarOhhhh! Cuanta ternura en tu trabajo, lo envidio!
ResponderEliminarDisfrútalo guapa, mas que guapa:)
La hermosura no solo se desprende del aspecto físico, si no también de la palabras que una escriba ;)
Q me sacáis los colores!! jajajaja.
ResponderEliminarGraaaaaacias ^^
Personalmente siento q para trabajar en un cole tienen q gustarte los niños y tener paciencia, vamos q es algo vocacional. Eso de q la gente estudie magisterio por las famosas vacaciones del verano, lo veo el mayor error q se puede cometer.
ResponderEliminarY que de repente te digan algo bonito...
ResponderEliminarA todas nos encanta que nos digan un piropo inesperado. Nos sube el ánimo, sí, y la autoestima. Y lo mejor de todo, nos saca una sonrisa enorme, y no hay nada más bonito que eso.
Un saludo desde http://retales-de-mis-noches-de-insomnio.blogspot.com.es/
PD: (no sé por qué ha desaparecido medio comentario), yo también estoy estudiando magisterio de infantil, y estoy deseando empezar las prácticas, por no decir que tengo unas ganas tremendas de acabar la carrera. Me encantan los niños y no hay nada mejor que sean ellos los que nos saquen una sonrisa. Porque es verles sonreír y el mundo se vuelve mucho más bonito.
ResponderEliminar:)
Un piropo inesperado alegra mucho, no se puede negar, pero viniendo de boca de unas personitas que son tan inocentes y que dicen lo q piensan sin tapujos, es maravilloso :)
ResponderEliminarYa verás cuando hagas las prácticas cómo disfrutas, yo aún recuerdo a veces a aquellos niños q tuve en prácticas, pero cuando empiezas a trabajar en tu clase, ni te cuento lo q se siente. Ánimo con la carrera :) y gracias por pasarte por aquí. un beso!
No me gustan los niños, nada nada nada nada nada nada...
ResponderEliminarA mi no me dicen guapa nunca xD
Si te gustaran los niños, igual si te decían guapa!! jajajaja ;)
ResponderEliminarOh, cómo me alegro de que tengas unos pequeñajos tan cariñosos y bueno, y de que te guste tu trabajo, pues es realmente importante :)
ResponderEliminarYo siempre he pensado que si estudiara magisterio sería el infantil. Me parece que luego hay niños realmente horribles y me desagrada a más no poder. En el colegio tuve muchas joyitas de compañeros u.u, ojalá no hubiera sido así.
Un abrazo =)
Yo tenía claro q si era profe iba a ser de los peques, los mayores me dan un poco de terror!! jajaja.
ResponderEliminarA mí nunca me han dicho guapo ni aunque fuera mentira :)
ResponderEliminarAsí que estoy seguro de que debe ser bonito como dices jeje
Besin!
Muy muy bonito es :)
ResponderEliminarLos pequeños, yo creo, son los únicos que saben sacar las sonrisas más sinceras. Me ha gustado leer eso, un beso <3
ResponderEliminarPor muy tristona q esté cnd llego al cole, en cuanto veo a los canijos, ya se me escapa la sonrisa :)
ResponderEliminarGracias por pasar Laura, un besote!
Si todos te dicen guapa, yo te tendré que decir fea ;)
ResponderEliminarAquí está el agradable! ¬¬
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