Hace 11 meses de aquel fatídico día para mí. Un día de incertidumbre y malas vibraciones que finalmente se vió traducido en el inicio de una de mis peores épocas.
Entonces sólo pedí una última oportunidad, quería ver si de verdad era un final o no, si se podía continuar o no. Me negaste aquella última oportunidad, y toda nuestra historia se vió manchada gracias a una actitud infantil llena de dudas de última hora.
Meses después soy yo la que se arma de valor para darte esa última oportunidad, a pesar del sufrimiento casi pasado. Me vuelvo a meter de cabeza en esto con muchísimo miedo, no podía permitirme volver a pasar dos veces por el mismo infierno, pero me decidí a ello. No podía volver a sufrir por la misma causa, pero tampoco me podía permitir no intentarlo una última vez, no quería quedarme sin saber si podía o no funcionar, a pesar de todas las palabras en contra y del apoyo nulo. Las condiciones entonces fueron duras, muy duras, pero no voy a volver a abrir mi corazón para que me lo pisen. Me he vuelto egoísta y precavida, desconfiada y poco dada a mostrar mis sentimientos, algo fría y exigente, pero mi nueva condición se debe al dolor.
La cosa empezó muy bien, mejor que bien en realidad, sólo había un punto que fallaba, precisamente el que yo más necesitaba: tiempo para los dos, tiempo donde sólo importaran los sentimientos y nosotros, sin nadie más. Las promesas al respecto no se han cumplido y la paciencia tiene un límite.
Es posible que vuelva a caerme, y entonces esucharé muchas veces aquello de "ya te lo decía", pero ya dicen que el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra (yo incluso más), y ahora no me quedarán dudas al respecto. He vuelto a intentarlo tal y cómo me pedía mi corazón y cuando me caiga no me haré tanto daño porque ya no caeré de las nubes. Lo pasaré mal, pero me sentiré orgullosa de haberlo intentado.
Y es que hay veces que con el amor que se siente no es suficiente. Ese amor hay que demostrarlo, no sólo mencionarlo. Y yo también lo he hecho mal, ya lo sé, pero el que avisa no es traidor, y cuando digo algo es por algún motivo.
La oportunidad está llegando a su final...
Entonces sólo pedí una última oportunidad, quería ver si de verdad era un final o no, si se podía continuar o no. Me negaste aquella última oportunidad, y toda nuestra historia se vió manchada gracias a una actitud infantil llena de dudas de última hora.
Meses después soy yo la que se arma de valor para darte esa última oportunidad, a pesar del sufrimiento casi pasado. Me vuelvo a meter de cabeza en esto con muchísimo miedo, no podía permitirme volver a pasar dos veces por el mismo infierno, pero me decidí a ello. No podía volver a sufrir por la misma causa, pero tampoco me podía permitir no intentarlo una última vez, no quería quedarme sin saber si podía o no funcionar, a pesar de todas las palabras en contra y del apoyo nulo. Las condiciones entonces fueron duras, muy duras, pero no voy a volver a abrir mi corazón para que me lo pisen. Me he vuelto egoísta y precavida, desconfiada y poco dada a mostrar mis sentimientos, algo fría y exigente, pero mi nueva condición se debe al dolor.
La cosa empezó muy bien, mejor que bien en realidad, sólo había un punto que fallaba, precisamente el que yo más necesitaba: tiempo para los dos, tiempo donde sólo importaran los sentimientos y nosotros, sin nadie más. Las promesas al respecto no se han cumplido y la paciencia tiene un límite.
Es posible que vuelva a caerme, y entonces esucharé muchas veces aquello de "ya te lo decía", pero ya dicen que el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra (yo incluso más), y ahora no me quedarán dudas al respecto. He vuelto a intentarlo tal y cómo me pedía mi corazón y cuando me caiga no me haré tanto daño porque ya no caeré de las nubes. Lo pasaré mal, pero me sentiré orgullosa de haberlo intentado.
Y es que hay veces que con el amor que se siente no es suficiente. Ese amor hay que demostrarlo, no sólo mencionarlo. Y yo también lo he hecho mal, ya lo sé, pero el que avisa no es traidor, y cuando digo algo es por algún motivo.
La oportunidad está llegando a su final...
El amor además de decirlo con palabras hay que demostrarlo con hechos.
ResponderEliminarTe deseo lo mejor, hoy y siempre.
Besitos dulces.
Gracias Hadaluna, siempre es maravilloso recibir tus comentarios :)
ResponderEliminarel corazón tiene razones que la razón no comprende b.p.
ResponderEliminarYa sé q el corazón es así... pero precisamente por eso sufrimos tanto :(
ResponderEliminarGracias por tu aporte Juan
Estoy con Hadaluna. Si el amor sólo se dice... malo. Ánimo con esa nueva oportunidad, espero de corazón que esta vez salga mejor. Lo mejor que has podido hacer ha sido escucharte a ti misma. Lo que digan los demás al final no importa, tuvieran razón o no. Ellos viven su vida, no la tuya. Piensa siempre en eso cuando te veas tentada de hacer lo que dicen los demás sólo porque te parece más sensato que lo que piensas tú. Los toros siempre se ven mejor desde la barrera.
ResponderEliminarBesos!!
PS: Tu segundo comentario sí llegó :) ¿Verdad que están guapos mis michis? jeje
A pesar de tener a casi todos ls amigos y familiares en contra, me decidí a hacer caso a mi corazón, xq al fin y al cabo es mi vida cómo tu bien dices. Si en tu vida no decides tú mal vamos! Aunque está bien ver las cosas desde afuera siempre tienes q ser tú quién decida.
ResponderEliminarY ya lo creo q están wapos wapos tus michinos! tienes una suerte tremenda! :)
bueno cuando todo el mundo esta en contra es una indicación de que pueden tener razon, pero sabes, los aragoneses somos asi XD
ResponderEliminarpuede ser q el mundo tenga razón, xo yo soy de las q tng q ver las cosas por mi misma, sino siempre me kedará la duda y eso no mola! cabezota hasta decir basta!! xD
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